Ilustradores: EL CONTRATO DEL DIBUJANTE.

Cinco ilustradores de moda a los que admiro, respeto y quiero.

CARL ERICKSON

Este ha hecho más portadas para VOGUE durante los 30´s, 40´s y 50´s que putadas Joan Crawford a su hija Christina:

KENNETH PAUL BLOCK

Kenneth Paul Block (1924-2009) ha sido un gigante de la ilustración de moda. De esos que ves su obra y no puedes más que cagarte en la Sra. Block y en porque no acudió a un médico abortista en su día para no traer al mundo a semejante cabrón. Envidia sana (como si eso existiese).

El caso es que Kenneth ya que no fue un nonato tuvo que trabajar y lo hizo en las publicaciones de Fairchild ...

luego con el tiempo decidió que para que trabajar para los demás pudiendo trabajar para uno mismo y se hizo propietario de Women´s Wear Daily y de W Magazine.

Casi ná.

Ilustró colecciones de Yves Saint Laurent, Pierre Cardin, Coco Chanel, Norman Norell….yo le amo de forma salvaje y descerebrada, una pena que con el resto del mundo no pase lo mismo y apenas se encuentren cosas suyas por internet:

ANTONIO LÓPEZ

No, no voy a hablar del coñazo de señor ese que se pasa cuatro años pintando un membrillo, sino de un ilustrador portorriqueño de mismo nombre que lo ha sido todo en la ilustración de moda de los ochenta, sin él, ciertos referentes icónicos de aquella década como los pómulos en triángulo no serían lo mismo.

Y cuando le daba por ponerse clasicón, telita.

GRANDE!:

ERNST DRYDEN

Este era más germano que "Ilsa, la tigresa de las SS", pero después de ser un reputado militar durante la Primera Guerra Mundial, decidió mudarse a Nueva York y convertirse en diseñador de Moda allá por principios de los años 30, que tanta testosterona de trinchera no podía ser buena, luego se fue a Jodebú donde triunfó como figurinista para dar el paso definitivo como ilustrador de Moda y Comercial.

Clase y refinamiento:

PIET PARIS

"Menos es más" , frase mítica que ahora mismo no me acuerdo si se la oí decir a Mies Van Der Rohe o la leí en el Hola! en una entrevista a Ivana Trump mientras felicitaba las Navidades desde su cabaña de Gstaad enfundada en un vestido de Versace y tumbada en su tresillo estilo Luis XV en pan de oro mientras un negro semidesnudo le servía Dom Perignon en una copa hipertallada de Baccarat con el filo salpicado de strass.

Bueno, el caso es que este cabrón coge cuatro figuras geométricas y...voilá! te hace unas ilustraciones que quitan el sentido.

Claro, que hay que saber como juntar esas figuras: